Pero hay que seguir avanzando. En el actual contexto necesitamos más que nunca nuevas y mejores empresas, emprendedores innovadores y profesionales de máxima solvencia. Se requiere para ello de una guía profesional y académica que aúne innovación y experiencia, como es el caso acreditado de nuestra escuela.
Estamos, en definitiva, bien preparados para los desafíos del presente y del futuro, listos para que todos nuestros alumnos también puedan estar a la altura de estos tiempos en los que nos jugamos la construcción de un mundo mejor y más sostenible desde el punto de vista social, económico y medioambiental.
Un mundo que se perfila muy diferente al que teníamos hace muy pocos años atrás. Con nuevas necesidades y, por tanto, con nuevos talentos, nuevos conocimientos y nuevas actitudes para hacerles frente, como la gestión de la incertidumbre.
Se van a imponer los líderes y los profesionales que sepan aprovechar el amplio potencial de la tecnología y de la inteligencia artificial. Los que destacan por su capacidad de iniciativa, de adelantarse, de cooperar y dialogar para encontrar soluciones innovadoras en todos los campos.
Todo este cambio de paradigma y de las reglas del juego se está haciendo además a la velocidad de la era digital. Nuestro compromiso es que nuestros alumnos y sus proyectos no pierdan ese tren y la oportunidad histórica de pilotarlo.