Productividad Personal
(Getting Things
Done con Outlook)

Metodología y
programa

Para ser productivo hay que focalizar la atención y aprovechar las herramientas disponibles.
Esto implica tener claro qué hay que hacer y cómo se quiere hacer, comprometerse con las cosas que realmente interesan, además de saber escoger según el momento (situación y energía disponible) y las prioridades… en definitiva, saber gestionarse a uno mismo y a qué (foco) se dedica la atención.

En muchas ocasiones se habla de productividad con trucos sobre cómo aprovechar mejor el tiempo, cómo gestionar las interrupciones, cómo establecer fechas límite para terminar las cosas con antelación…, y no se aborda la utilización de herramientas ya disponibles en los entornos de trabajo.

Una de ellas es Outlook que, aunque inicialmente ideada como «cliente» de correo, es una potente herramienta de productividad y permite personalizar sus opciones para manejar adecuadamente GTD, evitando distracciones y automatizando su proceso.

– Enfocar la actividad para conseguir resultados, teniendo una visión global y un control de la acción.
– Identificar todas las fuentes de elementos de nuestro día a día por las que nos llegan peticiones de cosas que hay que hacer.
– Tener claros los conceptos de alta y baja rentabilidad.
– Mejorar la priorización para integrar los objetivos a largo plazo con las demandas de cada día.
– Conseguir una planificación eficiente, aprendiendo a enlazar el «qué» con el «cuándo», construyendo el puente entre tareas, actividades y resultados.
– Utilizar Outlook como herramienta de gestión, automatizando el proceso.
– Introducir nuevas formas de pensar y de actuar para mejorar resultados, revisar los hábitos y alcanzar nuestros objetivos.