Atrae, emociona y vende en Redes Sociales.
¡Tienes que estar en redes sociales! Seguro que has escuchado muchas veces esta frase. Puede que te lo hayan dicho tus familiares, tus socios, tus empleados… Puede que incluso hasta una voz interior te lo recuerde de vez en cuando.
Pero, ¿tienes claro por qué? Y, lo más importante, ¿para qué?
Las redes sociales han cambiado la forma en la que las personas se comunican, se informan, se entretienen… y también compran.
Hoy en día tomamos decisiones de compra consultando las opiniones de otros usuarios, verificando la imagen de la empresa en sus redes, incluso preguntando directamente nuestras dudas.
Los hábitos de consumo han cambiado y, por tanto, también los medios para comunicarnos con esos consumidores se han visto obligados a cambiar. Las marcas, empresas y profesionales alimentan sus redes sociales para ganar su porción de visibilidad en la red.
En un universo digital plagado de mensajes, campañas publicitarias y contenidos de marcas, se vuelve cada vez más necesario cautivar a tu público potencial y fidelizarle. Las personas necesitan sentirse escuchadas, sentirse identificadas, sentir que pueden confiar en ti y en tus productos. ¡Esa es la clave para generar una comunidad!
Pero volvamos a esas preguntas que te lanzaba al principio.
¿Por qué tienes que estar en redes?
La respuesta es muy sencilla. Porque ahí es donde están tus potenciales clientes. Eso sí, para llegar a ellos tendrás que tener en cuenta algunas claves: – Estrategia. Lo primero es trazar un plan. Definir cuál es tu nicho, cuáles son tus objetivos y qué acciones pondrás en marcha para conseguirlos.
– Constancia. Es muy común que empieces con muchas ganas y te vayas desinflando si los resultados no llegan de manera inmediata. ¡Recuerda, persevera! – Adaptación. Los códigos y lenguajes de las redes están en constante cambio así que también tus acciones deberán adaptarse para conseguir resultados.
Y todo esto, ¿para qué?
Pues para que tu negocio crezca.
Sí, el objetivo final es contar con una comunidad fiel que sean no solo clientes, sino embajadores de tu marca. Ojo, eso no quiere decir que por el camino no haya que ir persiguiendo otros objetivos que estén basados en dos acciones principales.
– Atrae. Captar la atención de tu nicho.
– Emociona. Conectar con las personas para fidelizar.
No interpretes tu presencia en redes como un escaparate en el que vender productos sino como una oportunidad única para conectar con las personas.
Si quieres saber más sobre cómo definir una estrategia de ventas en redes sociales, apúntate a nuestro curso de Social Selling.